Las flores me hablan en primera persona para describir su función equilibradora de nuestro campo áurico. Lo hacen genéricamente como especie pero alguna me desvela sus propiedades particulares cuando entro en resonancia con su melodía o vibración etérica. Son entidades vivas altamente desarrolladas dispuestas a ayudarnos a desarrollar nuestra crisálida.
Después de narrar cómo y porqué florecen e invitarme a dibujar los recorridos electromagnéticos de su campo, hacen un símil entre su estructura energética y la humana.
Sabemos que actúan a nivel químico cuando las infusionamos o aplicamos en emplastes, a un nivel emocional cuando se diluye su esencia,
y lo que intuyo y experimento es una sanación instantánea cuando me permito entrar en su campo de resonancia para aliviar un dolor de cabeza o una mala digestión.
Entreveo la posibilidad de obtener todas sus virtudes si aprendemos a aplicarnos sus códigos lumínicos y geométricos dirigiéndolos a determinadas áreas del cuerpo o del intelecto sin necesidad de cortarlas.
Estamos en plena floración, a finales de la primavera del 2016, mientras paseo y gravo sus menajes en catalán y castellano mezclados. Transcribo algunos fragmentos.

…
El viento constantemente remueve los efluvios verdes de nuestra azotea *,
las ondas magníficas que emitimos desde la floración que hemos creado,
igualmente los humanos hacéis lo que os toca por vuestra parte
y desde la corona emitís una onda de una frecuencia poderosa
que os permite viajar más allá del territorio humano.
En el lugar del sombrero lleváis la floración gestada desde vuestra barriga hacia el pecho
unidos a la base, ahí donde el cuchillo os ha hecho gritar haciendo frente al olvido.
Es desde vuestra corona que os abrís de piernas al infinito
y dejáis que la placenta os reviente por dentro y os sacie
la sed de los que gemís porque no comprendéis
el camino incierto hacia el vacío de vuestra raíz.
También lleváis una flor en el pecho y otra en la garganta y más abajo, en el centro de vuestro vientre aturdido,
y por detrás se os extiende la cola que os hace sombra y os permite arraigar
y succionar sustancias de vuestro pasado para generar más vida
y entendimiento del presente y del futuro que está por venir.
Las bestias voladoras que estás observando en nuestras cabezas
son las prendas que pagamos por no ser humanos,
a ellas las necesitamos para el momento sagrado,
con ellas nos permitimos hacer el amor a pesar de ser asexuados,
es nuestra manera de entregar lo que hemos sudado.
Son los peregrinos que se detienen a oler
y tomar el néctar que hemos creado.
Es esta tarea exacta la que el humano debe imitar
generando la sustancia interna que es la esencia
de su ser creado aquí en la Tierra para entregarla a la fuerza del Rayo.
Vosotros los humanos os echáis atrás cuando llega la mosca postrera a tomar lo que habéis creado
pero se trata de entregar y no de tirarsos atrás, y haceros el regalo,
de saborear el último acto sexual entre la Madre Tierra y lo increado,
entregando vuestra esencia a las fuerzas que os han habitado
mientras erais vivíais e íbais floreciendo en vuestra azotea*
…
*azotea: esta palabra no sólo quiere significar la floración que se encuentra en lo alto del tallo de nuestra casa, sino que es la expresión del fuego de nuestro hogar, y lo sitúan emanando, encima de nuestra cabeza, la esencia de nuestra estructura lumínica o campo áurico

…
El vent constantment remou els efluvis verds del nostre terrat*,
les ones magnífiques que emetem des de la floració que hem creat,
igualment els humans feu el que us toca per la vostra banda
i des de la corona emeteu una ona d’una freqüència poderosa
que us permet viatjar més enllà del territori humà.
És al barret que hi dueu la floració gestada des de la panxa i el pit
a partir de la base, des d’on el ganivet us ha fet emetre un crit plantant cara a l’oblit,
és des de la vostra corona que us obriu de cames a l’infinit
i deixeu que la placenta us rebenti per dins i us sadolli
la set dels que gemegueu perquè no compreneu
el camí incert cap al buit de la vostra arrel.
També hi dueu una flor al pit i a la gola, i més avall, al ventre estabornit,
i pel darrera, la cua us fa ombra i us permet arrelar
i arrancar substàncies del vostre passat per generar més vida
i enteniment del present i del futur que ha de venir.
Les bèsties voladores que estàs guaitant als nostres caps
són les penyores que paguem per no ésser humans.
A elles les necessitem per aquest moment sagrat,
amb elles ens permetem fer l’amor tot i ser asexuats,
és la nostra manera d’entregar el que hem suat.
Són els peregrins que s’aturen a ensumar
i a prendre el nèctar que hem creat.
És aquesta tasca exacta que l’humà ha d’imitar
generant la substància interna que és l’essència
del seu ser creat aquí a la Terra per entregar-la a la força del Llamp.
Vosaltres els humans us tireu enrera quan arriva la mosca postrera a prendre el que heu creat
però es tracta d’entregar i no tirar-vos enrera, i fer-vos el regal,
d’assaborir el darrer acte sexual entre la Mare Terra i allò increat,
tot entregant la vostra essència a les forces que us han habitat
mentre ereu vius i florint al vostre terrat*.
Nosaltres les flors sóm els fruits de la pubertat de la Terra
i us recordem que estigueu preparats per a que la llum eterna aterri al vostre cap
tal i com ho fan els sers alats que venen a sucar les potetes al nostre teulat
fet d’amor en incandescència i laminat en froma d’essència
única i distinta en cadascun dels sers humans.
Així com el Sol desperta a la Terra cada matí amb el seu raig
quan la penetra y desperta tot renovant la parada nupcial,
així espereu ser tocats al moment d’enlairar-vos (la mort)
assaborint els darrers instants el vostre propi reclam,
deixant que us ensumi el Més Gran tot esclatant
…
* terrat: aquesta paraula no només vol significar la floració que es troba a la part alta de la tija, sinó que és l’expressió del foc de la nostra llar i el situen al damunt del nostre cap, emetent l’essència de la nostra estructura lumínica o camp àuric

no és permesa la reproducció de les imatges i textes sense el meu permis // no está permitida la reproducción de las imágenes y texto sin mi permiso